A través de las intervenciones terapéuticas de calidad que proporciona la Unidad de Hemato-
Oncología Pediátrica (UHOP) del Hospital General Juan María de Salvatierra, se fortalecen en
Baja California Sur las condiciones de bienestar de las y los menores de edad que son
confirmados con alguna incidencia cancerígena, que con frecuencia se tratan de leucemia,
linfomas o tumores en el sistema nervioso.
Estas atenciones que se han fortalecido mediante la suma de esfuerzos entre la actual
administración estatal con agrupaciones civiles, dan la oportunidad de mejorar la expectativa y
calidad de vida de pacientes como Kevin Antonio, de 11 años de edad, quien recibió su alta en
vigilancia durante 2022 al concluir satisfactoriamente el plan de tratamiento que le brindó esta
unidad hospitalaria junto con otras instituciones de salud, dijo el responsable de esa unidad,
Eduardo Altamirano Álvarez.
El oncólogo pediatra abundó que hace dos años, el menor, fue diagnosticado en ese nosocomio
estatal con un tumor maligno en la cabeza. Tuvo procedimientos quirúrgicos en 2021 y 2022
para extirpar la masa irregular que, por mostrar un crecimiento gradual, generaba un severo
riesgo para su capacidad neuronal, para el desarrollo de funciones vitales y su vida misma.
Aunque las cirugías fueron complejas debido al área en que se encontraba el tejido, tuvieron
resultados positivos.
No obstante, se determinó complementar su manejo clínico con 30 sesiones de radioterapia
que se efectuaron en el Hospital Infantil Teletón de Oncología (HITO) de Querétaro, esto con
base en los acuerdos de apoyo institucional suscritos con diversas organizaciones médicas
para mejorar el pronóstico de las niñas, niños y adolescentes sudcalifornianos que son
confirmados con este tipo de patologías, detalló el especialista.
Son acciones integrales que con el respaldo de la autoridad estatal y de asociaciones como Los
Cabos Children´s Foundation, Oleadas de Luz, Fundación El Cid, Asociación Mexicana de
Ayuda a Niños con Cáncer (AMANC) y Casa de La Amistad, brinda el equipo de la Unidad de
Hemato-Oncología Pediátrica (integrado por profesionales de medicina y enfermería, de trabajo
social, psicología, nutrición y compañeros de apoyo), para incrementar la sobrevida de la niñez
y adolescencia que tenga el infortunio de enfrentar esta enfermedad.
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